``Cincuenta sombras de Grey´´ de E. L. James.
''Tengo que poner mis ideas en orden. Tengo que alejarme de él. Doy un paso adelante, tropiezo y salgo precipitada hacia la carretera.
-¡Mierda Ana!- grita Grey.
Tira de mi mano con tanta fuerza que acabo cayendo encima de él justo cuando pasa a toda velocidad un ciclista contra dirección, y no me atropella de milagro.
Todo sucede muy deprisa. De pronto estoy cayéndome, y en cuestión de segundos estoy entre sus brazos y me aprieta contra su pecho. Respiro su aroma a limpio y saludable. Huele a ropa recién lavada y a gel caro. Es embriagador. Inhalo profundamente.
-¿Estás bien?- me susurra.
Con un brazo me mantiene sujeta, pegada a él, y con los dedos de la otra mano me recorre suavemente la cara para asegurarse de que no me he hecho daño. Su pelgar me roza el labio inferior y contiene la respiración. Me mira fijamente a los ojos, y por un momento, o quizá durante una eternidad, le sostengo la mirada inquieta y ardiente, pero al final centro la atención en su bonita boca. Y por primera vez en veintiún años quiero que me besen. Quiero sentir su boca en la mía.''
''-Dime que sí- susurra fervientemente.
Frunzo el ceño porque no lo entiendo.
-¿A qué?
-A nuestro acuerdo. A ser mía. Por favor, Ana- susurra suplicante, recalcando el ``por favor´´ y mi nombre.''
''-Nos vemos el miércoles- me dice.
Se inclina y me besa con ternura. Pero mientras está besándome, algo cambia. Sus labios me presionan imperiosamente. Sube una mano desde la barbilla hasta un lado de la cara, y con la otra me sujeta la otra mejilla. Su respiración se acelera. Se inclina hacia mí y me besa más profundamente. Le cojo de los brazos. Quiero deslizar las manos por su pelo, pero me resisto porque sé que no le gustaría. Pega su frente a la mía con los ojos cerrados.
-Anastasia- susurra con voz quebrada-, ¿qué estás haciendo conmigo?''
''-Yo quiero compartir mi estilo de vida contigo. Nunca he deseado nada tanto. Francamente, me admira que una joven tan inocente como tú esté dispuesta a probar. Eso me dice más de ti de lo que te puedas imaginar. No acabas de entender, pese a que te lo he dicho en innumerables ocasiones, que tú también me tienes hechizado. No quiero perderte. Me angustia que hayas cogido un avión y vayas a estar a casi cinco mil kilómetros de mí varios días porque no puedes pensar con claridad cuando me tienes cerca. A mí me pasa lo mismo, Anastasia. Pierdo la razón cuando estamos juntos; así de intenso es lo que siento por ti.''
''-No te lo puedo decir- susurra.
-¿No puedes o no quieres?
-No quiero.
-Entonces sabes por qué.
-Sí.
-Pero no me lo quieres decir.
-Si te lo digo, saldrás corriendo y no querrás volver nunca más.- Me mire con cautela-. No puedo correr ese riesgo, Anastasia.
-Quieres que me quede.
-Más de lo que puedas imaginar. No podría soportar perderte.
Oh, Dios.
Me mira y, de pronto, me estrecha entre sus brazos y me besa apasionadamente. Me pilla completamente por sorpresa, y percibo en ese beso su pánico y su desesperación.
-No me dejes. Me dijiste en sueños que nunca me dejarías y me rogaste que nunca te dejara yo a ti- me susurra en los labios.''
''-No quiero irme- susurro.
Se me vuelven a llenar los ojos de lágrimas.
-Yo tampoco quiero que te vayas- me dice con voz áspera. Alarga la mano y me limpia una lágrima de la mejilla con el pulgar-. Desde que te conozco, me siento más vivo.
Recorre con el pulgar el contorno de mi labio inferior.
-Yo también- digo-. Me he enamorado de ti, Christian.''
''Me vuelvo a mirar a Christian. Estamos a menos de metro y medio de distancia. Avanza e, instintivamente, yo retrocedo. Se detiene y la angustia de su expresión es palpable; los ojos le arden.
-No quiero que te vayas- murmura en voz anhelante.
-No puedo quedarme. Sé lo que quiero y tú no puedes dármelo, y yo tampoco puedo darte lo que tú quieres.''
No hay comentarios:
Publicar un comentario