''-Nunca has estado aquí antes- dijo él.
-Estás equivocado.
Él negó con la cabeza.
-Te habría recordado.
-En realidad,- dijo con una voz muy baja-, no esto aquí ahora. Esto no está pasando en absoluto. Sólo estás viviendo un sueño mío.
-¿Lo estoy?- él dobló la cabeza, su boca sonriente muy cerca de la suya. Su aliento era caliente contra sus labios-. Entonces no despiertes, ángel. Me gustaría quedarme por un rato.''
''-Tienes que marcharte, Sara... porque quiero abrazarte así hasta que tu piel se funda en la mía. Te quiero en mi cama, tu olor sobre mis sábanas, tu pelo extendido por mi almohada. Quiero tomar tu inocencia. ¡Dios! Quiero arruinarte para cualquier otro.
A ciegas Sara aplanó la mano sobre su mejilla, contra la raspadura de barba recién crecida.
-¿Qué pasa si yo quiero lo mismo?- susurró ella.''
''-Esto es por ti- refunfuñó-. Sólo por ti- él buscó a tientas su muñeca y llevó su palma a su pecho. Incluso a través del grosor de lino, paño y lana, ella pudo sentir el sonoro latido de su corazón. Ella se retorció para apretarse con más fuerza contra él, y él contuvo la respiración-. Un hombre nunca debería acercarse tanto al infierno como esto- dijo ásperamente-. Pero incluso con el diablo susurrándome en el oído que te tome, no puedo hacerlo...''
''Conozco los deseos más íntimos de tu corazón, y voy a hacerlos realidad.''
''No hay ninguna lógica para ello. Nadie puede explicar por qué una mujer puede arrancar el mismo corazón de un hombre de su pecho, y no soltarlo nunca. Para usted esa mujer es la señorita Fielding, ¿verdad?''
''-¿Derek?- dijo con decisión.
-No me dejes- susurró.
De repente la abrazó dolorosamente, hasta que le dolieron las costillas por la presión. Sus manos se deslizaron sobre su cuerpo en una búsqueda frenética, mientra su aliento vibraba en su oído.
-Dijiste que nunca me dejarías- él la abrazaba como si temiera que le fuera arrancada.
-Ahora estoy aquí- le tranquilizó ella-. Estoy aquí mismo.''
''-¿Qué ocurre, ángel?
-Una vez me dijiste que no sabías lo que era sentirse feliz.
-Lo recuerdo.
-¿Y ahora?
Derek la miró durante un largo momento, luego la arrastró contra él, encerrándola en sus brazos.
-Es esto- dijo con la voz ligeramente ronca-. Justo aquí y ahora.
Y ella descansó contra su corazón, feliz.''
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