''-Esta noche no habrá peleas. Estás tan hermosa que no quiero desperdiciar el tiempo que pasemos juntos discutiendo. Como empieces a discutir, simplemente te besaré hasta que te calles. Estás avisada, así que, si decides desafiarme como una gatita enfurecida, pensaré que quieres que te bese. ¿Qué te parece? ¿Mmm?
-¡Me parece, señor Constantinos, que seré tan dulce y encantadora como me sea posible!
-Siendo dulce y encantadora también conseguirás que te bese- Bromeó Nikolas con voz ronca-. ¡Creo que, de un modo u otro, yo saldré ganando!''
''-No, no lo comprendes- musitó-. Nikolas, yo...- iba a decirle que nunca había hecho el amor, que era el miedo a lo desconocido lo que la acobardaba, pero él puso un dedo sobre los labios.
-No quiero saberlo- gruñó-. No quiero que me digas cómo te han tocado otros hombres. Creí que podría soportarlo, pero no puedo. Me siento demasiado celoso; no quiero oírte hablar nunca de otro hombre.''
''-Me vuelves loco; ni siquiera puedo dormir sin soñar contigo... ¿y me dices que no te importa lo que yo haga? Pues haré que te importe. Derribaré esa muralla que has levantado a tu alrededor...''
''-Un solo beso, Jessica. ¡Un solo beso y comprendí que Diana jamás podría apagar el fuego que tú has encendido! ¿No me perdonarás un simple beso?
-¿Me lo perdonarías tú a mí?
-Yo te habría separado a la fuerza de cualquier hombre que hubiese cometido la estupidez de tocarte- prometió con voz grave-, y le habría partido la cara. No creo que pudiera controlarme si viera a otro besándote, Jessica. Pero no volvería la espalda y me iría, sin más; te llevaría conmigo.''
''-¡Jessica, mírame! ¡Mírame!- Nikolas la zarandeó ferozmente, y ella abrió los ojos para ver la expresión de resplandeciente triunfo que había en los de él-. Dímelo- insistió Nikolas, inclinándose sobre ella, acercando los labios a los suyos. Colocó la mano encima de su corazón, sintió el revelador latido y acarició con ternura las suaves y femeninas curvas que encontró-. Dímelo- susurró, acariciándole los labios con los suyos.
Jessica alzó las manos hasta sus hombros, aferrándose a la fuerza de Nikolas mientras notaba como la suya propia cedía, arrastrada por la marea de sus emociones.
-Te quiero- gimió con una vocecita ronca-. He intentado no amarte. Eres tan... arrogante. Pero no puedo remediarlo.
Nikolas la apretó contra sí con tanta fuerza, que ella gritó. La soltó inmediatamente.
-Mía- musitó depositándole ardientes besos en el rostro-. Eres mía. Y no dejaré que te vayas de mi lado. Te adoro, cariño. Durante semanas he estado loco de frustración, deseándote pero temiendo asustarte hasta el punto de que te alejaras de mí.''
''Ella le había ofrecido su corazón una vez y él lo había despreciado. Jamás volvería a darle la oportunidad de herirla de esa manera.''
''-Mira mi mano, Jessica. Mira mi mano sobre tu cuerpo. Me volví loco de furia el imaginar la mano arrugada y anchada de un viejo tocándote así. Y era aún peor imaginarte con otros hombres.''
''-Al menos me abriste los ojos, me sacaste de mi absurdo ensueño. El amor no es inmortal, Nikolas. Puede morir.''
''-Me perdones o no, eres mía y jamás te dejaré ir. Te lo repetiré tantas veces como haga falta hasta lograr que me creas.''
''-Dime, cariño, ¿amas a Niko?
-¡Sí! Pero lo he estropeado todo... ¡Jamás me perdonará lo que le dije! Si me amara, sería diferente...
-¿Y cómo sabes que no te ama?''
''-Ahora comprendo por qué recelabas tanto de mí; pero, en aquel entonces, cada rechazo era como una bofetada en la cara- siguió diciendo suavemente-. Quería dejarte en paz; jamás sabrás hasta que punto deseaba alejarme de si y olvidarte, y me ponía furioso no poder hacerlo. No estoy acostumbrado a que nadie ejerza esa clase de poder sobre mí- confesó como burlándose de sí mismo-. No podía admitir que, finalmente, me habían derrotado; hacía todo lo posibles por recuperar la ventaja, por dominar mis emociones, pero nada funcionó.''
''-Soy todo tuyo, cariño; lo he sido desde el momento en que entraste en mi oficina y te acercaste a mí. Aunque reconozco que me gusta ver ese fuego verde en tus ojos; estás preciosa cuando te pones celosa.''
''-¿Cuándo reconociste que me amabas?
-Cuando estabas en Cornualles- confesó él con voz ronca, intensificando la presión de sus dedos. Se detuvo para mirarla con una sombría expresión en el rostro mientras recordaba-. Pasaron dos días hasta que Charles se dignó decirme adónde habías ido, pensando que ya había soportado bastante castigo; creí que iba a volverme loco. Llevaba don días intentando contactar contigo por teléfono, esperando delante de tu casa durante horas para ver si regresabas. No dejaba de pensar en todo lo que había dicho, de recordar la expresión de tus ojos cuando te marchaste, y me entraban sudores fríos al pensar que te había perdido. Fue entonces cuando comprendí que te amaba, porque la idea de no volver a verte era un tormento.''
No hay comentarios:
Publicar un comentario